AFUEGA´L PITU
Hace ya unos cuantos años, durante una visita
a la quesería de sus padres, Xosé Ambás me contó
varias teorías populares sobre el origen del peculiar nombre
del queso de “afuega´l pitu”. Para muchos, se llama
así simplemente porque se trata de un queso seco que a veces
se te atasca en la garganta (en el pitu) y por eso, para no “ahogarse”,
conviene acompañarlo de un buen culín de sidra. Sin
embargo yo prefiero otra explicación mucho más fantástica
e inverosímil, los más veteranos recuerdan que antiguamente,
para saber si el queso estaba bueno, se le daba un trozo al gallo
y si se “afogaba´l pitu” era que estaba en su punto.
Hoy se producen en Grado más de 130.000 kilos anuales del queso
“afuega´l pitu”, los gallos e incluso las gallinas
serían una especie en extinción si se continuasen aplicando
aquellos rudimentarios controles de calidad.
El concejo moscón ha sido tradicionalmente el productor por
excelencia de este queso; actualmente cinco de las siete queserías
que existen están aquí afincadas, pero es que además
las otras dos (en Somao y Salas) sólo producen este queso como
actividad secundaria. Grado tiene por tanto el producto, pero también
el escaparate, me refiero a sus dos mercados semanales, a sus mercadones
y su feria de muestras. A pesar de todo esto los moscones nos hemos
dejado robar la cartera con este tema del “afuega´l pitu”.
Me explico, por un lado dejamos que patentase la marca un listillo
de fuera, una industria quesera que ni siquiera debe producir este
tipo de queso (y si lo hace es un producción mínima).
También dejamos que Morcín se nos adelantase y sean
ellos los que organicen el Certamen de Queso de Afuega´l Pitu.
Pues sí señores hemos dejado que el marketing, que este
queso, se asocie a Morcín cuando toda o casi toda la producción
profesionalizada se encuentra en Grado.
Hay más cosas que no entiendo, cuando hace cinco años
se formó una asociación de productores, creo recordar
que se hablaba y se publicitaba como “queso de la falda del
Aramo”, o algo así, y el motivo principal de la campaña
era un folleto con forma de queso “de trapu” o bola típico
de Morcín y Riosa, en detrimento del tipo de Grado en forma
troncocónica y que es con diferencia el que más se produce.
Cuando a uno le roban la cartera no queda más remedio que intentar
volver a llenarla. El ayuntamiento moscón está elaborando
un proyecto de taller de empleo dedicado a la elaboración de
este tipo de queso, el objetivo final sería formar a gente
joven y poner en marcha una cooperativa. Se ha realizado también
un estudio de este sector de la producción del queso en Grado
donde se pone de relieve su importante mercado no sólo actual
sino potencial. Este informe habla también de la necesidad
de superar varios problemas como la creación de un molde uniforme
para desuerar, un envase adecuado para su conservación y comercialización
fuera de nuestra región o la unificación de pesos y
medidas. Otro objetivo planteado es la falta de una etiqueta de calidad
o denominación de origen, que podría buscarse a través
de un órgano que represente al sector y que estaría
integrado por productores, distribuidores (que son los mismos) e instituciones
públicas. Bien están todas estas medidas, bien está
que de una vez nos remojemos de forma abundante para que no vuelva
a atragantársenos nuestro querido “afuega´l pitu”.