VIEJO CUBIA
Tengo dos noticias, una buena y otra mala. La buena
es la inminente aparición de una publicación sobre Grado,
la mala es que eso sea noticia.
Como moscón me siento frustrado al comprobar la paupérrima
bibliografía que existe sobre mi pueblo. Tengo envidia sana
-un poco insana también- de otros municipios asturianos que
se han ocupado y preocupado de recuperar su pasado, estudiar su patrimonio
e incluso analizar su presente y su futuro por medio de distintas
publicaciones.
Precisamente por eso quiero aplaudir la iniciativa de la asociación
ACFAYD de editar una revista de carácter histórico sobre
Grado y que han bautizado con el nombre del río local “Viejo
Cubia”. El primer número se distribuirá gratuitamente
e incluye artículos sobre tradición oral, noticias y
estudios históricos, patrimonio arqueológico y arquitectura
popular; entre los colaboradores destacan nombres como los de Joaquín
Manzanares, Juan Vázquez, Armando Graña o Boni Ortíz.
Lo que ya podéis apuntar en vuestra agenda es su fecha de presentación
en sociedad que será el próximo día 18 de diciembre
en la Casa de Cultura.
Hablar de la asociación ACFAYD es hablar de un nombre propio,
César García Santiago, un apasionado moscón que
a pesar de residir en Gijón lleva años trabajando de
forma altruista en la recuperación del patrimonio fotográfico
y documental de su pueblo natal. El fruto de su trabajo ha podido
verse en una docena de exposiciones de fotos antiguas, en la edición
de un par de libros y en colaboraciones con varias publicaciones.
Al referirme a César ya he echado mano en alguna otra ocasión
al dicho “hace más el que quiere que el que realmente
puede”. Esa es su gran virtud, hacer cosas, a su manera, pero
al fin y al cabo hacerlas que es lo que importa. Cuando se propone
algo y decide apostar por un proyecto, lo saca adelante aunque sea
a trancas y barrancas, aunque las únicas manos que le echen
sean al cuello. Aún me sorprende su capacidad de tirarse a
la piscina sin saber nadar y sin tan siquiera haberla llenado de agua.
César es como una hormiguita a la que dejan trabajar porque
resulta inofensiva y no molesta, lo lamentable es que existan tan
pocas hormigas frente a tantas cigarras.
El “Viejo Cubia” es un río necesario que debería
seguir fluyendo durante mucho tiempo, es posible que necesite ser
canalizado pero nunca habría que ponerle barreras.